CREACIÓN
DE EQUIPOS DE ALTO RENDIMIENTO
¿Qué es el
trabajo en equipo?
El
trabajo en equipo “implica, ante todo, romper el aislamiento de las personas en
el ámbito laboral y potenciar el grado de autonomía que puede tener un grupo.
En otras palabras, promover la delegación de funciones y responsabilidades”
¿Cuáles son
las ventajas?
Desde
el punto de vista del trabajador, como apunta la profesora Lucila Finkel, “es
indudable que el trabajo en equipo supone en la gran mayoría de los casos una
mejora de la calidad de vida laboral, una mayor implicación en los procesos de
trabajo y una oportunidad importante para el aprendizaje y el enriquecimiento
mutuo”. Pero no sólo se adquieren y comparten conocimientos tangibles, “sino
que se desarrollan aprendizajes sociales como el saber escuchar, ponderar,
negociar alternativas, plantear estrategias reivindicativas, etc.”, añade. En
cualquier caso, esta experta declara que el trabajo en equipo es una habilidad
que se puede aprender, “y potenciar algunas tendencias innatas hacia la
cooperación que muchas veces se pierden en el trabajo profesional”.
Otra
de las principales ventajas del trabajo en equipo es el efecto sinergia,
la posibilidad de obtener resultados que
van más allá de las capacidades de los componentes del equipo. “cualquier
organización, de cualquier sector, tamaño o actividad, es susceptible de
aprender a trabajar en equipo, si bien deberían prestar más atención aquellas
organizaciones pertenecientes al sector terciario, cuyo aporte de valor está
aún más directamente relacionado con la gestión eficaz de las personas:
sociosanitario, educativo, investigación, turismo, hostelería, ocio, cultura,
espectáculos, incluso la Administración Pública…”.
Mantener la
motivación
Mantener
la motivación de un equipo de empleados es un aspecto muy importante, sino el
más, de la gestión de una empresa. De ahí que la mayoría de los programas se
centren en elevar la motivación, “la motivación de un equipo viene de entender
y conseguir que los profesionales vean su empresa como un lugar donde pueden
hacer realidad sus sueños. Desde esta visión tan poderosa y con la ayuda de
modelos, metodologías y herramientas adecuadas, el equipo desarrolla una
cultura que le permite alinear los objetivos, motivaciones e intereses
personales con los colectivos. Desde este sentimiento y proceder, es desde
donde surge la pasión necesaria para crecer individualmente y como equipo”. Los
factores más valorados de motivación y compromiso son: identificación con el
sentido de la organización, clima, oportunidades de crecimiento y desarrollo
profesional, liderazgo, unidad de equipo, salario, compensación y reputación,
entre otros.
Principios para crear Equipos de Alto Desempeño
Principio #1: Incluye
sólo personas con fuerte predisposición a la ejecución y posiciónarlas
correctamente.
Existen
personas que son “pensadores”. Estos
individuos piensan, filosofan, planean,
evalúan, etc. Existe otro grupo de personas que son “Actuadores”. Ellos están
siempre impulsados a actuar, acometer una tarea, lograr un objetivo.
La
verdad es que todos tenemos algo de “pensador” y algo de “actuador”. Lo
importante es que sólo incluyas en tu equipo a personas que tienen una
tendencia a actuar más que a pensar.
(En
un equipo puede haber personas que hacen labor de consultores o mentores… ahí
sí podemos incluir los “pensadores”)
Nunca
olvides que es mucho más fácil educar a un “actuador” que activar a un
“pensador”
El
otro punto incluido en el principio #1 es que necesitas posicionar a las personas
correctamente. Hay que conocer a la persona, sus fortalezas, su pasión, sus
debilidades y sus ambiciones para posicionarla en el lugar que dé los mejores
resultados.
Uno
de los errores más comunes es dar mayor responsabilidad a un individuo que no está
listo para ella. Esto frustra al individuo y lo lleva al fracaso. Necesitamos darles
el tiempo a las personas de madurar para que puedan continuar teniendo éxito en
el siguiente nivel.
Si
existe algo que quiero que recuerdes de este artículo es lo siguiente: incluye
en tu equipo sólo a personas que tienen predisposición a actuar.
Principio #2:
Claridad perfecta en el QUÉ:
El
equipo necesita tener una claridad absoluta en QUÉ hace la organización en la
cuál pertenece.
Una
de las situaciones más comunes a las que me he enfrentado es cuando le pregunto
a distintos miembros del mismo equipo “qué” hace su organización, recibo
diferentes respuestas.
Equipos
de alto desempeño tienen muy claro el “qué” hacen ellos para ganar.
En
organizaciones deportivas de alto rendimiento es sencillo ver este concepto,
pero en otro tipo de organizaciones es un poco más complicado. Por ello es
importante definir con tu equipo “qué” hace para ganar y comunicarlo hasta el
cansancio.
Principio #3:
Claridad perfecta en el POR QUÉ
Equipos
de alto desempeño tienen también una claridad perfecta en el POR QUÉ. ¿Cuál es
la misión del equipo? ¿Qué dejaría de pasar si el equipo no existiera?
En
organizaciones sin fines de lucro usualmente es fácil determinar el “por qué”:
Darles de beber y comer a los necesitados, descubrir la cura de alguna
enfermedad, erradicar algún problema del mundo, justicia social, etc. Sin
embargo, en las organizaciones con fines de lucro es un poco más complicado.
Muchas
veces necesitamos ir a los fundadores para buscar el “por qué” ellos decidieron
crear la empresa o la organización. ¿Qué necesidad ellos vieron que decidieron
suplir?
Descubrir
el “por qué” es una magnífica fuente de motivación y le entrega un propósito a
la organización.
Principio #4:
Claridad perfecta en el CÓMO:
Los
equipos de alto desempeño tienen claridad perfecta en “cómo” hacer las cosas y
las ejecutan de la manera esperada una y otra vez.
Los
equipos deportivos de alto rendimiento practican las jugadas una y otra vez
hasta que las pueden ejecutar sin pensar. Los militares, policías y bomberos
tienen procedimientos que son repetidos hasta el cansancio y ejecutados de
manera perfecta una y otra vez. Las salas de emergencia en los hospitales
actúan de la misma manera.
Cuando
eres parte de un equipo necesitas estar seguro que los otros miembros actuarán
de la manera esperada. De la misma manera, ellos esperan que tú actúes de
cierta manera. Por ello, los equipos de alto rendimiento documentan todos los procesos
claves y se aseguran que los miembros los ejecuten a la perfección.
Un
punto importante es que todo equipo, luego de documentar los procedimientos,
necesita evaluarlos constantemente para asegurarse de que estén actualizados
(debido a los constantes cambios de tecnología, cultura, metas, etc.)
TRANSFORMACIÓN
DE LOS INDIVIDUOS A ELEMENTOS DE EQUIPO.
El
pasaje del individuo al equipo implica la especificación de los siguientes
parámetros:
· Un
propósito compartido y significativo para sus miembros y para la organización.
· Los
objetivos y metas asociados a dicho propósito, sus alcances, los planes para
cumplirlos y los criterios para evaluarlos y los indicadores para medirlos.
· Los
roles de los miembros, adjudicados en base a la utilización complementaria de
sus conocimientos y habilidades.
· Los
métodos de trabajo para llevar a cabo las actividades que conducen al logro de
los resultados.
· Una
actitud de cooperación entre los miembros, fundada en la convicción de que el
resultado pretendido sólo puede ser alcanzado con el esfuerzo y el compromiso
de todos
Sin
embargo y a pesar de que los equipos gozan de gran popularidad debemos tener en
cuenta que existen personas que quieren ser reconocidas por el logro de sus
metas individuales y que las empresas también han conseguido mucho por las
aportaciones de personas que trabajan de manera individual. Algunas personas
poseen apreciaciones enraizadas acerca de la relevancia y la singularidad de la
persona. El individualismo y el colectivismo, son los valores culturales que
influyen en la manera en que con posibilidad se acepten y operen los equipos y
los grupos.